El presidente de la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos (Capainlac), Erno Becker, habló acerca de la situación del sector al cierre del 2022 y detalló que hubo un leve crecimiento. Mencionó que la principal preocupación se centra en el aumento del contrabando debido a la falta de controles.
En comunicación con la 650 AM, el titular del gremio lechero aseguró que pese a la complicada situación que se registró a nivel país, como consecuencia de la sequía y que puso en riesgo el rinde de los productos agropecuarios, el sector de la leche experimentó un buen pasar y lograron superar las barreras climáticas y económicas.
Indicó que el 2022 lo cerraron como un año normal, sin muchas novedades, pero con un leve crecimiento que a pesar de que sea en menor proporción, genera optimismo en los productores.
“Tuvimos un leve crecimiento, pero siempre un pequeño del 2% o el 3% es un crecimiento, sobre todo cuando uno habla de una producción global a nivel país. La economía lechera fue buena”, aseguró.
En ese sentido, manifestó que optaron por un sistema productivo de calidad, donde la leche limpia, menos bacterias y con sanidad animal, con buenas prácticas de manufacturas, fueron premiadas.
Sobre el punto, añadió que se logró una gran variedad de productos dietéticos, enriquecidos, dando espacio a tipos de leche que todos los consumidores pueden elegir.
No obstante, indicó que existe una gran preocupación y está relacionada directamente al contrabando que sigue en auge en todo el país y sin controles sanitarios.
Señaló que además de introducirse a nuestro mercado un producto sin controles, el mismo ingresa competir contra la producción nacional, lo que representa un riesgo importante para ellos.
Por otro lado, habló acerca de los productos derivados de la leche que logran salir al mercado internacional y explicó que se están dando exportaciones de leche en polvo, manteca y quesos, siendo el Brasil el principal comprador de este sector.