La demanda de productos orgánicos ha crecido dramáticamente en la última década. Esto es en parte debido a la percepción de los consumidores de que estos productos son más seguros y más nutritivos. Sin embargo, estas diferencias aportan una mejor salud en las personas, por lo que consumir productos orgánicos es discutido fuertemente. Durante años, los científicos han estado tratando de responder la pregunta de si el uso de las normas de producción orgánica en realidad afecta la calidad de sus productos.
Un estudio publicado recientemente en el British Journal of Nutrition, revela una estadística conocida como meta-análisis que ofrece evidencia de que la producción orgánica en realidad puede aumentar los nutrientes esenciales en los alimentos.
Este estudio podría potencialmente poner fin al largo conflicto y debate. Antes, algunos científicos afirmaron que no había diferencia significativa entre los alimentos orgánicos y los convencionales, otros juraban que estos alimentos si tenian beneficios para la salud. Los consumidores tenían sus propias razones diferentes para comprar productos orgánicos, que van desde el valor nutricional a preocupaciones ambientales. Si bien estos trabajos científicos no son el resultado de cualquier nuevo experimento, el hecho es que, sus conclusiones se basan en la comparación de 170 estudios publicados y es lo que lo distingue del resto.
Los científicos examinaron la base de datos entre los diferentes estudios mediante la observación del contenido de nutrientes de la leche de vaca orgánica y convencional. Ellos escogieron para analizar los productos lácteos, en particular, debido a que actualmente representan el 15% del total del mercado de alimentos orgánicos en los Estados Unidos, y aproximadamente el 30% en algunos países europeos. Los consumidores están específicamente preocupados por los efectos de los residuos de plaguicidas en la leche y creen que estos productos tienen una mayor concentración de compuestos nutricionalmente deseables.
Para nuestra sorpresa, la carne y los productos lácteos orgánicos demostraron contener aproximadamente 50% más ácidos grasos que de omega-3. El aumento es el resultado del medio ambiente en el que los animales son criados, en donde ellos pastan como consecuencia, se puede encontrar en nuestra alimentación.
"No es algo mágico sobre lo orgánico," dijo Charles M. Benbrook, un consultor de la industria orgánica que es el co-autor de los estudios. "Es sobre lo que los animales están siendo alimentados".
Estos resultados son parte de algo mucho más grande que los alimentos sólo orgánicos; muestra como los distintos métodos de agrícola pueden influir el contenido nutricional de los productos.
En otro estudio también publicado por el British Journal of Nutrition encontró que los cultivos orgánicos, como las zanahorias y el broccoli, contienen una mayor concentración de una gama de antioxidantes y otros compuestos potencialmente beneficiosos. Por lo que se concluye que los cultivos orgánicos tuvieron un 50% más antocianinas y flavonoles en comparación con los cultivos convencionales. Las antocianinas son unos compuestos vegetales que ejercen una gran variedad de efectos fisiológicos positivos en la salud. Son pigmentos hidrosolubles presentes en las bayas de algunas frutas, especialmente en las que presentan un color azul-púrpura como en el mirtilo, la uva negra, el arándano y la grosella entre 200 más, esta es la razón por la cual la fruta orgánica parece mucho más fresca.
Las frutas y verduras orgánicas también son conocidas por proteger las células contra el daño, y ayudan a combatir las enfermedades. Por descontado, todo depende en el medio ambiente en el que se cultive. Por ejemplo, los cultivos convencionales se encuentran generalmente en ambientes estresantes, y están expuestos a los ataques de insectos y otros peligros. La fruta o la verdura se ve obligada a adaptarse y luchar por sí misma, dando por resultado un sabor amargo o falta de color. Otra diferencia entre los dos, es que los cultivos orgánicos crecen mucho más lento que los convencionales. Esto les permite crecer, en lo que los científicos llaman metabolitos vegetales secundarios, también con mejores beneficios para la salud.
Dado el panorama, todos estamos de acuerdo que lo que comemos es importante. Ya sea para fines ambientales o beneficios para la salud, estos estudios revelan diferencias impactante en los alimentos que nosotros comemos.