Las alternativas a la leche de origen vegetal se encuentran entre los segmentos de bebida de más rápido crecimiento en todo el mundo.
Las innovadoras bebidas pueden estar elaboradas a partir de nueces, cereales, semillas y antiguas variedades de granos como la quinoa, el alforfón y el mijo.
El crecimiento de este segmento puede deberse a que cada vez son más los consumidores que quieren comer de forma más sana, entonces prestan mucha atención a los alimentos que ingieren.
Las alternativas lácteas de origen vegetal no contienen lactosa de forma natural y en general se considera que tienen menos colesterol y grasa que la leche de origen animal; el contenido de proteínas, vitaminas y minerales es similar. Además, las alternativas lácteas de origen vegetal se suelen digerir más fácilmente que los productos lácteos.
La leche de almendras está avanzando a gran velocidad en el mercado. Para hacerla se mezclan almendras tostadas y molidas con agua, es baja en grasa y azúcar, no contiene colesterol ni gluten. Por su parte, la leche de coco está hecha de agua y pulpa de coco finamente molida, tiene una textura cremosa que la diferencia del resto.
Para elaborar las bebidas con soja, se desvainan sus semillas, se ponen en remojo y se muelen con agua caliente. Esta leche tiene un alto contenido de proteínas y vitaminas. La leche de soja tiene menos calorías que la leche de vaca, y no contiene colesterol ni gluten.
Las bebidas de arroz son populares gracias a su cremosidad, son las que mayor contenido de azúcar tienen. Para su elaboración, se muele el arroz, se cuece en agua y se machaca; después de tamizar y filtrar, se añade aceite de alazor o de girasol al líquido filtrado, que lo emulsiona y refina el sabor. No contiene prácticamente nada de grasa.
Para la elaboración de bebidas de avena, los copos de avena descascarillados se muelen, se añaden al agua y se cuecen; el líquido es fermentado durante varias horas, luego se tamiza y se filtra. También en este caso el líquido filtrado se emulsiona con aceite de girasol o de colza, para darle el característico color blanco de la leche. Contiene betaglucano, que ayuda a reducir el nivel de colesterol en el cuerpo humano.
Si elige alternativas lácteas elaboradas con granos o semillas como arroz, avena, cáñamo o quinoa, debe saber que estas tienen menor contenido de proteínas y mayor contenido en carbohidratos y fibra, tampoco contienen lactosa, y son bajas en grasa.